Invasión exitosa

Belgrano venció por penales a Platense y avanzó a los 16avos de final de la Copa Argentina. Tras el 1-1 en los 90 minutos, La B ganó por 4-1 en los penales y festejó con las más de 20.000 personas que invadieron La Rioja.

El equipo alternativo que paró Guillermo Farré fue de menor a mayor. El primer tiempo comenzó siendo superado por el Calamar, que rápidamente se puso en ventaja a los siete minutos. Luego de un gran centro de Ignacio Schor, el experimentado Gonzalo Bergessio anticipó a Willy Olivera y empujó la pelota hacia la red poniendo el 1-0 desde el arranque.

El Pirata sufrió mucho por los costados en los primeros 45 minutos, la línea de 5 en el fondo no logró hacer pie y fueron varias las veces que los de Vicente López desbordaron por los costados y generaron peligro.

Sin embargo, a medida que fueron pasando los minutos, el equipo se empezó a acomodar en el campo y el partido se puso parejo. Ariel Rojas estuvo bien posicionado en el eje de la mitad de la cancha y de a poco comenzó a generar juego en ataque.

A los 40 minutos, luego de un gran pase en profundidad de Rojas, la pelota le cayó a Fabián Bordagaray. El ex Dorados de Sinaloa empalmó de primera un gran centro al corazón del área que conectó con Joaquín Susvielles, quien de cabeza estampó la pelota en el palo derecho del arquero calamar, dándole al Pirata el empate justo antes de finalizar el primer tiempo.

El complemento fue parejo, no hubo un dominador del juego. Los dirigidos por Farré se enfocaron más en defender el resultado y Platense tuvo dos oportunidades de gol, una en la cual apareció la figura de Manuel Vicentini, quien detuvo un remate de cabeza de Brian Mansilla que pudo haber vuelto a poner en ventaja a los de Primera División.

Terminado el partido llegaron los penales, y nuevamente Vicentini se hizo fuerte y le atajó el penal al defensor Ruiz Díaz. Sumado al que erró Mansilla, que dio en el palo, y la eficacia de los cuatro pateadores piratas, la victoria por penales y el pase a la siguiente ronda se volvieron para Alberdi. El rival a enfrentar en 16avos de final es el Estudiantes de la Plata del Ruso Zielinski.

Pero ahora Belgrano se debe enfocar de nuevo en la Primera Nacional, ya que el próximo domingo a las 17.10 hs deberá visitar el Estadio Alfredo Beranger en Buenos Aires para jugar ante Temperley, en busca de aumentar la ventaja de puntos sobre San Martín de Tucumán, equipo que quedará libre ésta próxima fecha.

1×1:

Vicentini: Buen partido. Seguro, atajó una clave en el segundo tiempo y uno de los penales, fundamental en la victoria.

Olivera: Flojo partido. No estuvo a la altura.

Meriano: Regular. No desentonó pero tampoco destacó.

Oliver: Regular. Impreciso y lejos de la marca, se soltó cuando pasó a jugar de 3.

Compagnucci: De menor a mayor. El primer tiempo sufrió mucho haciendo toda la banda, ya en el complemento con la ayuda de Sanchez de 4, se soltó y tuvo más proyección.

Sánchez: Buen partido. Como siempre aporta desde cualquier posición, hoy se lo vio mejor jugando de 4 que de volante interno.

Rojas: Buen partido. Preciso en los pases y aportó defensivamente.

Tomasetti: Regular. Intermitente, por momentos aparece y en otros pasa desapercibido.

Ochoa: Regular. Muy intermitente.

Bordagaray: Buen partido. Por momentos encaró y buscó generar peligro, gran asistencia en el gol.

Susvielles: El mejor. Jugó bien de espaldas, gambeteó e hizo un gran gol de cabeza, sumado a que convirtió el penal.

Rébola: Buen segundo tiempo. Le dio seguridad a la defensa, gran salvada a Mansilla en una de las pocas jugadas de peligro de Platense en el complemento. Además convirtió el primer penal.

Hesar: Aportó lo que pudo por la banda izquierda. Jugó lejos del arco, no es su posición natural. Acertó desde los 12 pasos.

Vegetti: Entró para patear el penal. Poco pudo aportar el capitán, bien fuerte y con seguridad pateó el penal para dar el pase de ronda.

Ramirez: Entró para aguantar el resultado. No entró del todo bien, algunas imprecisiones, se nota que estuvo mucho tiempo parado.

Novaretti: Poco para aportar. Jugó 10 minutos pero se mantuvo firme atrás.